sábado, 11 de septiembre de 2010

Adivinador de cartas

Este es un truco de cartomagia muy fácil y que no tiene necesidad de cartas trucadas, y que si se sabe presentar bien, es un truco con mucho efecto.

Con una baraja cualquiera de cartas, después de barajar (o dejar que baraje un espectador), sin que nadie de te vea, mira la última carta de la baraja y memorizala. A continuación coloca de forma caótica todas las cartas de la baraja en una mesa, pero de tal forma que la última carta (la que viste antes) quede un poco escondida e fuera del alcance del espectador. Después, dile a uno de tus espectadores que vas a adivinar su carta, y que para ello eliga una carta de ese montón caótico, y que sin mirarla te la ponga en la palma de la mano. Ahora, tu le dices al espectador la carta que viste antes, y a continuación, SOLO tu miras la carta y con una sonrisa en tu rostro di que adivinaste la carta (el espectador, probablemente te pida que le enseñes la carta, pero inventate una excusa). Después, con otro espectador haz lo mismo que hiciste con ese, solo que de esta vez le tienes que decir al espectador la carta que escogió el anterior espectador. Y así sucesivamente con otros espectadores, según el número de ellos que quiera que participen.
Y ahora viene el final; dile a los espectadores que basta ya de que escogan las cartas, que usted tiene tanto derecho como ellos a escoger su propia carta y adivinarla. Así pues, con un gesto de indecisión, escoga la carta que vio al principio del truco, pongala en la palma de su mano, y diga la carta que vio del espectador anterior. Y a continuación, el gran final, enseñe juntas todas las cartas que escogieron tus espectadores, y verán que coinciden totalmente con las que digiste, ignorando (eso espero), que en ningún momento adivinaste alguna carta.

1 comentario:

Unknown dijo...

Menuda mierdaaaaaaaaaaaaaaaaaaa